PRECIO-DE-GASOLINA7:00 de la mañana, aún estás medio dormido, estás en la estación con la manguera de combustible en la mano y rellenas de gasoil el depósito del coche de gasolina de tu mujer, que habitualmente no coges…te das cuenta de ese detalle justo cuando terminas…
Equivocarse a la hora de repostar combustible es un error bastante común entre los conductores. Lo ideal es darse cuenta de la equivocación antes de poner el motor en marcha. Pero, ¿qué puede ocurrir si no hemos sido conscientes?
 

Si te equivocas de combustible, avisa a la grúa

Aunque cada vez es más difícil que los conductores se confundan al repostar combustible (los depósitos incluyen pegatinas que recuerdan el tipo de carburante, la boca del depósito y las mangueras de las gasolineras son de distinto grosor…) todavía se dan casos de personas que caen en este error. Si esto ocurre, ten en cuenta las siguientes recomendaciones::

  • Lo ideal es darse cuenta de haber repostado combustible equivocado antes de arrancar el coche. Entonces bastaría con llevar el coche a un taller en grúa par que vacíen el depósito y lo limpien.
  • Si hemos puesto el motor en marcha es posible que a los pocos metros comience a fallar. Tendremos que ser conscientes del problema y no tratar de forzar la mecánica, ya que lo único que conseguiremos será agravar la avería.
  • Si repostamos diésel en un coche de gasolina el motor comenzará a dar tirones hasta pararse. En un principio, un vaciado y limpieza del depósito, limpieza de los conductos y sustitución del filtro de combustible debería ser suficiente. Pero si hemos insitido cuando el coche ha empezado a fallar es probable que el carburante haya llegado al catalizador, que deberá ser sustituido e incrementará notablemente el coste de la avería.
  • Si repostamos gasolina en un coche diésel moderno (en los antiguos puede no pasar nada siempre que sea en pequeñas cantidades), el motor también comenzará a dar tirones bruscos y se parará. En este caso puede que no baste con una limpieza y sustitución del filtro de carburante. Es posible que se estropee la bomba de inyección y hasta uno o varios inyectores, piezas de un coste más elevado.

En el mejor de los casos nuestro despiste puede costarnos unos 100 euros sin contar el desplazamiento de la grúa, que puede no estar incluido en nuestro seguro. En el peor de los casos, la sustitución de piezas como el catalizador o la bomba de inyección ya son otro cantar… la próxima vez, asegúrate de tomar algo de café y estar más consciente antes de repostar 😉